Se organizo al curso en grupos de a 4 personas cada uno y se pidió que que 2 integrantes escogieran ser los que construían y ensamblaban piezas pero estando ciegos y dos podían ver y dirigir a los constructores ciegos pero siempre guiando por medio del tacto y nunca de las palabras .
Fue así como nos turnamos para poder armar algo sin previa estructura determinada si no mas bien improvisada.
Los materiales usados fueron esencialmente brochetas de coctel grandes y cinta adhesiva .
El resultado apreciado en las siguientes imágenes :
¿Qué aprendí?
Es bueno confiar y dejarse guiar cuando vamos armando un soporte nuevo en nuestro camino y no siempre conocemos como ensamblar todas las piezas sin perdernos o hacernos daños (las brochetas pinchaban feo ) , por lo mísmo siempre es bueno contar con la guía de quienes si son capaces de poder ver desde afuera lo que a veces nosotros no logramos captar.
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